En varias ocasiones, he reportado la analogía de las apariciones de la Virgen María que elige como fecha la del nacimiento de Eugenio. Y como si deseara, naturalmente para los más atentos y para aquellos que saben, darnos un ulterior signo, del profundo vínculo que transcurre entre las dos personalidades espirituales. Así traen distintos textos sobre aparición de Lourdes: «La fecha del jueves 25 de marzo 1858 es la de la aparición de la Virgen María que se mostró Bernardette, que al verla dijo en occitano bigordino (la lengua que hablaba Bernardette), levantando los ojos al cielo y alzando las manos: "Que soy era immaculada concepciou". Bernardette repitió esta frase, que no comprendía, y corrió a decírsela al párroco, que quedó perturbado: cuatro años antes el Papa Pío IX había hecho de la expresión Inmaculada Concepción un dogma y Bernardette dijo que ignoraba que así se designaba a la Virgen Maria "...
Nosotros unidamente nos confiamos a su Celeste consuelo y a su Celeste Consolación y muy especialmente la recordamos, especialmente en este día de festejo.
Celeste Madre María, adorable flor que encarna el perfume del Amor y de la Consolación del Dios viviente. El sol está alto en el cielo rodeado por sus bonitos colores, cuando nuestro sentimiento en forma de pensamiento, acaricia la piel de tus ingenuos pies. Preciosa María, preserva nuestro corazón y nuestra alma, afecta con las tus divinas manos nuestras ansias, nuestras alegrías y nuestros dolores transformándolos en una única melodía.
Protégenos del mal y de sus tentaciones y haz que cada uno de nosotros sea el Templo de Luz y de Sabiduría, según el Santo querer de quien es nuestro Maestro.
Protégenos del mal y de sus tentaciones y haz que cada uno de nosotros sea el Templo de Luz y de Sabiduría, según el Santo querer de quien es nuestro Maestro.
Santísima María, Madre nuestra, visita en cada pensamiento y en cada vigilia presentándonos frente al Divino Padre, activos, justos y pacíficos para el santo programa que servimos y que queremos. Esparce tu amable consuelo sobre nuestros pasos y en nuestras acciones, para que se traduzcan siempre en la única y más gran verdad de todos los tiempos.
Tus Hijos en Eterno...
Floridia 08 de Diciembre 1996
Floridia 08 de Diciembre 1996
Eugenio amaba así recordarla en este día especial.
Inmaculada Concepción
Miriam, Madre deliciosa y amable, celeste amor, progenitora de Aquel que fue ,es y será Maestro de Vida y de Verdad.
Miriam, amor de la inefable Luz Omnicreante, esplendor de piedad y misericordia, nuestro amor filial es tuyo, ayer, hoy, en eterno. Nosotros estamos contigo, con tu dilecto Hijo y con sus ángeles. Nuestra tarea es fielmente llevada adelante según los planos del altísimo Señora. El cansancio nos arremete, pero porque tu amor nos consuela y nos apoya, la fuerza rebrota y el espíritu se engrandece. Hoy es tu día y los rosales florecieron. En nuestros corazones florece tu celeste amor, Madre beatísima nuestra.
Tus Hijos y Hermanos de Tu
Hijo Jesus
Egenio Siragusa
Nicolosi 08 diciembre de 1986
Nicolosi 08 diciembre de 1986
